Prueba #6

Mientras caminaba por la aldea oculta entre la arena, pudo observar muchas cosas que antes no se había dado cuenta, por ejemplo aunque irracionalmente y hasta un tanto ególatra prefirió caminar hasta la torre del kazekage en vez de ir corriendo o saltando entre los tejados, la arquitectura de la aldea era muy diferente a como era el sonido, en verdad era otra cosa muy diferente, se le había bonita aunque un tanto complicada, se le figuraba como un panel de termitas, como el panal de una abeja, quizá solo era una idea loca de una maldita, como le había llamado Karin, jamás nadie le había llamado asi parecía hasta increíble que ella se hubiese ganando el titulo de maldita y es que lo más increíble es que lo mereciera.

La noche era bastante oscura y aunque también era bastante fría, le agradaba aun cuando a ella no le gustaba el frio, siempre ha preferido lugares mas calidos, lugares que sienta que le acobijan, sin duda ese es el tipo de lugares que prefiere, pero sentía cierta nostalgia por el lugar, por alguna razón increíble, quizá porque ella también era kage y sabia lo que significaba tener que cuidar de una villa, que todo debía ser para y por la gente que te seguía y te hacia su líder, pero esta vez, ella no iba a profesar la paz, venía por un articulo que necesitaba y sin duda, se lo llevaría, se sentía alegre de que casi nadie tratarse de interceptarle ya que sin duda odiaría tener que hacer una destruccion innecesaria para todos.

Cada vez que se acercaba más hacía la torre, se acercaba más al centro, podía ver como su arquitectura, la limpieza y el cuidado que tenían por la aldea eso le agradaba, en verdad le daba un buen ver a la aldea, había poca gente, pero en suna siempre había habido poca gente o al menos esos eran los rumores cuando ella fue otokage por primera vez, pero las descripciones de Luka se quedaba cortas cuando por fin podia mirar la aldea por si misma, el clima era todo lo que había descrito Luka, en verdad era asi, en verdad había ese ambiente de tranquilidad que parecía casi anhelante por cualquiera, seguramente la Arena tenia lo suyo, muy dentro de la aldea, muy dentro de su gente.

Por fin había llegado a su destino, ella tomo aire y puso sus manos detrás de su nuca y miro la torre, escuchaba los sonidos nocturnos y también observo el cielo oscuro totalmente, era mejor así, tenia que hacer lo que debía hacer. Cerro los ojos un momento y tomo aire de nuevo, le miro una vez más a aquel cielo. –Gomen nee… Ojala esto no fuese necesario- susurraron en una voz ronca y quebradiza. Bajo la mirada y se quedo en silencio por un momento y trago saliva, era la hora de la verdad quisiera o no.

No habría paso atrás, o saldría de esa aldea o saldría de esa aldea sin importar lo que sucediera, tenia que salir. Ella tomo aire y se concentro ya no ser una jinjuriki era bastante problemático, su chakra se gastaba y no tenia la misma resistencia de otras ocasiones, dio un salto tan alto que logro pararse en la pared, comenzó a correr por esta con ayuda de su chakra hasta llegar a la ventana de la oficina de la Kazekage, miro ahí un cuerpo y entonces sin pensarle de su cuerpo salió un enorme destello que inundo toda la habitación y quizá más alla, al tiempo que ese destello salía de su cuerpo cerro los ojos para no tener que disminuir la capacidad de su byakugan.

Comenzo a hacer sellos y levanto su palma izquierda encontra el interior de la oficina realizando una gran bola de electricidad para poder someter a cualquiera que estuviera dentro de la oficina, el estruendo fue bastante grande, cuando Darkness volvió a abrir sus ojos, ya tenia el byakugan activado y eso solo era el incio.